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martes, 7 de julio de 2015

La frase del martes - 125



Nuestro carácter nos hace meternos en problemas, pero es nuestro orgullo el que nos mantiene en ellos.

- Esopo

domingo, 5 de julio de 2015

Odiseo. El juramento. Valerio Massimo Manfredi

Si algo tengo claro cuando cojo un libro de Manfredi es que voy a pasar un buen rato. Ya me pasó con la trilogía de Alexandros y con El ejército perdido y ahora me ha vuelto a pasar con Odiseo. El juramento.

A pesar de que la historia de Odiseo (Ulises) es muy conocida yo no había leído nada sobre él hasta ahora y, aunque no puedo decir que me ha sorprendido la historia, sí que hay cosas que pasan que no conocía. Otras muchas eran de esperar como por ejemplo qué pasa con Aquiles (el del talón, ya sabéis) o con la guerra de Troya y su caballo.

A lo largo de los primeros capítulos conocemos a Odiseo desde que es un niño que espera la llegada de su padre, el rey de Ítaca, hasta que se convierte él mismo en rey. De la mitad hacia el final nos damos cuenta de que si hay algo que quiere y desea Odiseo por encima de todas las cosas es vivir su vida en paz con su familia: sus padres, su mujer, Penélope, y con su hijo pequeño. Sin embargo Helena de Esparta, más conocida en la historia como Helena de Troya, provoca una terrible guerra al abandonar a su marido, Menelao, y fugarse con Paris, príncipe de Troya. Esta guerra llevará no sólo a Odiseo, sino a todos los demás reyes, a luchar en las puertas de Troya durante años. Y aquí es donde yo me pregunto si merece la pena sacrificar tantas vidas porque una mujer haya sido infiel a su marido. El orgullo de éste ha sido herido, no lo dudo, pero de ahí a pasar años atrincherado junto a miles de hombres más, matando y muriendo, sólo porque no acepta que le han dejado, me parece el colmo del sinsentido.

Odiseo es la persona elegida para tratar de llegar a un acuerdo con Troya para que devuelvan a Helena, y cuando estos se niegan, es quien lidera las estrategias a seguir en las batallas. Odia estar en la guerra, pero hizo el juramento (de ahí el nombre del libro) de proteger y luchar del lado del elegido por Helena contra cualquier agravio.

El juramento: Helena de Esparta era tan hermosa que todos la querían como esposa. Odiseo al ver que su belleza podría traer problemas propuso que todos los pretendientes hicieran un juramento:

- ...No se trata simplemente de una mujer, es Helena de Esparta, y será ella quien elija a aquel de vosotros que quiera como marido. Todos lo demás jurarán fidelidad a ese matrimonio como si Helena se hubiera prometido con cada uno de vosotros. Juraréis uno tras otro a medida que seáis llamados por el heraldo, descalzos sobre la piel recién descuartizada de un toro gigantesco inmolado a los dioses de los Infiernos. Y sed felices: desde este momento, hasta que Helena haya pronunciado un nombre, cada uno de vosotros puede soñar con ser el elegido.

Tenemos infinidad de personajes mitológicos conocidos en este libro (Aquiles, Paris, Laertes, Menelao, Penélope...) Todos tienen su importancia en la historia aunque he de reconocer que en algún momento me he visto un poco perdida con tanto nombre extraño (extraño para mí, claro). Por lo demás el libro me ha gustado mucho. Lo tenía desde hacía mucho tiempo esperando en la estantería (uno de los muchos que tenía pendiente desde que me fui a Chile) y lo he disfrutado mucho. La historia de Troya termina. El libro tiene un final. Pero es un final abierto en el que se ve a Odiseo en un barco. Punto. Si llega y en qué estado llega a su destino tendremos que averiguarlo en el siguiente libro de Odiseo. El retorno  (me da a mí que en éste aparecerán las famosas sirenas del libro de Homero) No sé vosotros pero, en lo que a mí respecta, no me lo pienso perder.

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Muchas gracias a Grijalbo por el ejemplar (y siento el retraso en publicar la reseña)