No sé explicar muy bien por qué, pero tenía bastante miedo a este libro. Había leído opiniones demasiado dispares que me habían hecho dudar, así que al final siempre lo dejaba pasar. Ahora que lo he leído tengo que decir que los miedos no tenían ningún fundamento y que he disfrutado de cada aventura que le ocurría a la protagonista.
Calpurnia Virginia Tate es una niña, la única de varios hermanos, que pasa el verano de 1899 junto a su abuelo, un señor muy serio que hasta el momento no le había dedicado demasiado tiempo. Él, siempre metido en sus libros, dentro del laboratorio o en la biblioteca, lugar al que nadie más puede entrar, haciendo sus cosas; ella, siempre con miedo de molestar a su abuelo no se atreve casi a dirigirle la palabra, hasta que un día se arma de valor y le formula una pregunta sobre unos insectos. Sin embargo, a pesar de lo valiente que es al preguntarle, el abuelo le contesta que está seguro de que es una niña lista y que podrá llegar a la solución ella sola si observa al insecto en cuestión con detenimiento.
Después de ese primer encuentro, abuelo y nieta se dan cuenta de que comparten la afición por la investigación y pasan cada vez más tiempo juntos, algo que a la madre de Calpurnia no le gusta demasiado porque piensa que se tiene que dedicar a cosas como tareas domésticas, tocar el piano o hacer ganchillo.
El libro sigue una historia, pero cada capítulo tiene una mini historia dentro que comienza y acaba con el capítulo en cuestión. En este sentido me recordó a Anne la de Tejas Verdes, que seguía el mismo patrón de un capítulo para cada aventura.
Los hermanos, algunos más pequeños y otros más mayores, son también personajes importantes, igual que la amiga, la madre y la cocinera. En la época en la que está centrada la historia el papel de la mujer era el que era, pero Calpurnia no está de acuerdo. No ha escuchado hablar de feminismo, pero ve la diferencia que hay entre sus hermanos y ella y lucha por conseguir los mismos derechos que tienen ellos. Su sueño no es casarse y criar un montón de niños como le han dicho que tiene que hacer cuando sea un poco más mayor, sino aprender ciencia con su abuelo. Ve las injusticias y no se las calla.
He disfrutado mucho de esa novela, pero sobre todo de la historia del abuelo y la nieta. Esa complicidad que tienen y ese respeto mutuo me parecen muy importantes para Calpurnia. Nadie la toma en serio y a nadie le importa lo que pueda opinar, excepto a él.
Algún día iba a tener todos los libros del mundo, estantes y estantes llenos. Viviría en una torre hecha de libros; me pasaría el día leyendo y comiendo melocotones. Y si algún caballero con armadura se atrevía a acercarse en su blanco corcel y a rogarme que le lanzara mi trenza, lo acribillaría con huesos de melocotón hasta que se marchara.
7 comentarios:
Es un libro que en su momento me llamó la atención, pero que luego, entre tanto pendiente, lo he ido olvidando. Ahora vuelves a animarme para leerlo. Espero que esta vez no se quede en el olvido.
Besotes!!
Hola,
este libro y el otro que es azul (no sé bien si va antes o después que este) me llaman la atención sobre todo por su portada pero, después de leerte, no sé si disfrutaría de su lectura.
Un beso
¡Ayyyy! ¡Mi Calpurnia! Me encanta esta novela, encuentro que es adorable y tan tierna. Me gusta muchísimo la protagonista y sus deseos de ser naturalista, la relación con su abuelo, el momento histórico (ese cambio de siglo en donde la tecnología promete futuro pero que tanto cuesta que la luz llegue a los pueblos de la América profunda), la inquietud de género... Me alegro mucho que te hayas decidido a darle una oportunidad y que la hayas disfrutado tanto. Besotes.
Yo me lo leí hace tiempo, pero me gustó mucho y dejó un gran recuerdo en mí. Como a ti, me encantó la complicidad entre abuelo y nieta y, además, creo que tiene un mensaje que es perfecto para estos tiempos que vivimos donde las mujeres muchas veces tenemos que seguir "peleando" para hacernos un hueco ya sea en el ámbito científico o cualquiera. Ahora tengo pendiente la segunda parte, pero creo que tendrá que espera. Besos, Fani.
Yo debo ser la excepción, me gustó la forma en la que está contada y la protagonista, su ambición, la relación con el abuelo....pero me aburrió como una ostra jaja
Un beso!
Este lo tenía apuntadísimo en su momento y ahí se fue quedando... el caso es que no me importaría leerlo =)
Besotes
¡Hola!
Me pasa igual, no sé por qué hay algo que me echa para atrás a la hora de leerlo, pero tu reseña me ha hecho replanteármelo, la verdad. Me llama mucho lo que dices sobre el papel de la mujer y cómo se siente ella.
¡Un saludoo!
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