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lunes, 25 de octubre de 2021

La librería ambulante - Chritopher Morley

Este fue uno de los libros que me acompañó en mis vacaciones de verano y lo disfruté muchísimo. Se ha convertido en una de las mejores lecturas de 2021 y no porque la historia sea muy original o cuente algo novedoso, no; ha sido, sobre todo, por la manera de narrar del autor. Hacía mucho que no marcaba tantas frases en un libro. 

Helen McGill vive y trabaja en la granja familiar. Su hermano, Andrew McGill, es un escritor de renombre y eso parece ser excusa suficiente para no hacer absolutamente nada que no sea escribir. Las tareas de la casa, así como todo el trabajo que lleva la granja, recaen sobre Helen hasta que, harta de todo, decide dar una lección a Andrew y se marcha de casa para vivir una aventura. Pero no es una aventura cualquiera, no, compra un carruaje con forma de vagón bautizado como Parnaso y se echa a la carretera a vender libros y a vivir de manera nómada. Su hermano, decide ella, se quedará a cargo de la granja durante un tiempo. 

Mientras tanto, Roger Mifflin, el vendedor del carruaje, le pide que lo acerque a la estación para que pueda coger un tren a Brooklyn, donde espera poder escribir su propio libro. Helen, que lo que quiere es salir cuanto antes de allí para que su hermano no pueda impedirle marchar, accede a dejarle donde él quiere y ambos salen a toda prisa de la granja familiar acompañados de un perro y del caballo que tira del Parnaso. Así, piensa Helen, yendo juntos un rato, podrá aprender el oficio de librera y el funcionamiento del carromato.

Sin embargo, ya sabemos todos que las cosas no son como una se imagina y, lo que en principio iba a convertirse en una aventura se convierte en la AVENTURA. Andrew sale en pos de ella y el señor Mifflin parece no querer abandonar el Parnaso tan fácilmente, cosa, que curiosamente, no parece importarle demasiado a Helen. Distintas situaciones se van sucediendo una detrás de otra mientras Helen avanza hacia su tan ansiada libertad. Por primera vez se siente viva y quiere que esa sensación le dure mucho tiempo. 

La historia nos la narra Helen McGill en primera persona. Nos pone en antecedentes primero y después nos va contando qué ocurre una vez que decide comprar el Parnaso y sale por la puerta de su casa. No hay demasiados personajes en este libro: hay algunos secundarios como la vecina de la granja o algunos compradores de libros, y tres personajes de los que sabremos bastante más: Andrew McGill, Roger Mifflin y, sobre todo, Helen McGill. Al contarnos ella la historia podremos ver más allá de lo que dice. Sabemos lo que piensa y cómo se siente y es un placer acompañarla en su viaje tanto real, sobre el Parnaso, como el viaje metafórico que hace interiormente. 

Como decía al principio, no es tanto lo que cuenta sino cómo lo cuenta, y es que la escritura de Morley es casi poética.

"No tengo facilidad para el estilo grandilocuente. Siempre he tenido la impresión de que es mejor leer un buen libro que escribir uno malo y pobre. Y he mezclado tantas lecturas a lo largo de mi vida que mi mente está llena de ecos y voces de hombres mejores que yo."

La historia tiene puntos divertidos y otros entrañables y es muy fácil engancharse a su lectura. Cuando lo terminé me enteré por un comentario en Instagram, de que había segunda parte y no pude por menos que comprarla en la Feria del Libro. Espero no dejar pasar demasiado tiempo antes de ponerme con ella porque de verdad creo que me puede gustar mucho. 

¿Os gustaría vivir una vida nómada vendiendo libros sobre un carromato? A mí no me importaría en absoluto. 

jueves, 7 de octubre de 2021

La biblioteca de la medianoche - Matt Haig

En 2009 tuve dos ofertas de trabajo parecidas, pero no iguales. Las dos estaban relacionadas con la publicidad, pero una estaba en el lado del cliente y la otra en el lado del soporte, es decir, en una página web con contenido de noticias y ocio. El salario era el mismo en ambos (bastante malo en los dos casos todo hay que decirlo) y también las condiciones de trabajo. Lo que me hizo decantarme por el que al final fue mi trabajo durante seis años, fue el ambiente joven y fresco que había. Tomé mi decisión y, esa misma, me llevó a vivir más de un año en Chile y más tarde a mi trabajo actual en el que estoy muy contenta. Me planteo qué habría pasado si me hubiera ido a la otra empresa. ¿Habría llegado alguna vez al puesto en el que estoy ahora? ¿Habría viajado a Chile y conocido a la misma gente? Lo primero es probable, no somos tantos en el sector, pero lo segundo lo dudo muchísimo. 

La historia dentro de La biblioteca de la medianoche habla precisamente de esto. De todas las decisiones que tomamos y de las consecuencias de las mismas. Para bien y para mal. 

Nora no encuentra sentido a su vida. En mitad de la treintena las cosas se le han torcido tanto que no ve nada más que una salida posible. Su exnovio, su extrabajo, su gato, su hermano... todo parece estar en su contra, así que una noche toma una mala decisión que la lleva hasta un lugar desconocido y extraño: una biblioteca de paredes grises y libros verdes con tantos pasillos como decisiones ha tomado en la vida. Dentro, una única persona a parte de ella misma: la señora Elm, la antigua bibliotecaria de su instituto.

Cada uno de los libros contiene una historia que Nora podría haber vivido de haber tomado otra decisión en el pasado y, con ayuda de la señora Elm, comienza un viaje que, no solo la lleva de una vida a otra, sino que además le enseña quién es realmente. La idea es que, en algún momento, Nora encuentre una vida en la que se sienta feliz, pero, ¿qué pasa si no la encuentra? ¿Es posible que siga saltando de vida en vida por toda la eternidad o todo esto tiene fecha de caducidad? 

Esto de los saltos nos lleva a otro tema y es que Nora vive en un mundo en el que hay muchas dimensiones, algo así como la peli "Spiderman, nuevo universo", que si no la habéis visto os recomiendo mucho, por cierto. Cada una de las vidas que visita es un mundo paralelo en el que la Nora que vive en él continúa con su vida una vez que la original desaparece para volver a la Biblioteca de la Medianoche. Eso sí, nosotros, durante la lectura, solo seguimos a la original. 

También se habla de filosofía en este libro. Nora estudió filosofía, y aplica muchas de las cosas que aprendió en la carrera a todas sus vidas. 

Para Sylvia Plath, por ejemplo, la existencia era una higuera. Y cada una de las vidas que hubiese podido vivir, la de mujer felizmente casada, la de poeta de éxito, se sustanciaba en un higo jugoso y dulce. Pero, claro está, le era imposible probar todos los higos, así que todos, menos uno, terminaban pudriéndose en la rama, delante de sus narices.

La biblioteca de la medianoche es el tercer libro que leo del autor y puedo decir que me gusta cómo escribe y los mensajes que da en sus libros; por eso sé que leeré más cosas suyas. Sin embargo, sí que quiero recalcar que la temática de este libro: depresión, suicidio, puede herir la sensibilidad de algunas personas. Para mi gusto no es ofensivo y trata de dar un mensaje positivo, pero he leído comentarios en instagram sobre cómo se tratan estos temas en el libro y están descontentos con el resultado, así que yo lo aviso también por si acaso.

Puede que con todo lo que he contado de los mundos paralelos y el saltar de vida en vida parezca un lío, pero para nada. La historia se sigue perfectamente. 

He disfrutado mucho de la lectura y, aunque las primeras páginas reconozco que se me atragantaron un poco (culpo más a la vuelta a la rutina que al libro), lo cierto es que leí más del 80 % del libro en un solo día porque se puso interesante y no pude parar. La historia me ha gustado mucho, es entretenida, bonita y, bajo mi punto de vista, da que pensar. Yo la recomiendo. 

Los otros dos libros que he leído del autor son de temática navideña y también me gustaron mucho. Os dejo el enlace a uno de ellos (el otro me acabo de dar cuenta de que no lo reseñé).




martes, 5 de octubre de 2021

Érase una vez... septiembre

El mes pasado estuve dos semanas de vacaciones y las aproveché para leer bastante. Lo curioso es que al llegar a casa me quedé atascadilla con la lectura que tenía entre manos y rompí la racha lectora.

Normalmente a mis vacaciones me acompaña el kindle porque suelo viajar al extranjero y el peso de la maleta está limitado, pero este año, como me he quedado en la península y he viajado en coche, he podido meter todos los libros que he querido. 

La librería ambulante de Chistopher Morley. Helen, una mujer de cuarenta años cansada de matarse a trabajar en la granja familiar mientras su hermano se dedica a escribir y convertirse en un escritor de éxito, decide comprar el carromato del señor Mifflin y lanzarse a la carretera. De esta manera comienza una aventura que nunca pensó que podría vivir. Una historia entrañable en la que es tan importante lo que cuenta como cómo lo cuenta. Muy recomendable. En la Feria del Libro compré la segunda parte y no creo que tarde en ponerme con ella. 

Death Note 3. Os recuerdo la trama. Un cuaderno de muerte cae a la tierra y el nuevo dueño tiene el poder de matar a quien quiera siempre que escriba el nombre de la persona que quiera matar y tenga en mente su rostro. En este tomo aparece un segundo cuaderno de muerte que va a complicar la existencia a Kira, dueño del primero, y a la policía. Sigo disfrutando mucho de este manga aunque ya sepa lo que va a pasar por el anime. 

El Faro de Paco Roca. Este libro lo encontré al buscar libros ambientados en Girona. Es un cómic que cuenta la relación de un farero y un soldado republicano en la guerra civil. Una historia emotiva y entrañable en una edición preciosa. Muy recomendable. RESEÑA.

Cazadores de sombras 2. Ciudad de ceniza de Cassandra Clarke. La protagonista de la saga lo pasa bastante mal en este libro. Todo se le vuelve del revés a la pobre y, aun así, no tira la toalla. Sigo pensando que habría disfrutado de lo lindo con estos libros en mi adolescencia. Vampiros, cazadores de demonios, hombres lobo, brujos... Tiene una mezcla no muy original, pero no por ello menos entretenida. A mí me tiene enganchada.

La biblioteca de la medianoche de Matt Haig. Este fue el libro que se me atragantó a la vuelta de vacaciones, pero no porque no fuera interesante. Simplemente la vuelta al trabajo en la oficina, a las tareas domésticas y a la rutina en general me pasó factura. En fin, que hubo un día que cogí el libro y no pude parar hasta terminarlo. Es un libro que habla del suicidio y la depresión, pero que, a pesar de la crudeza del tema, a mí me dejó buen sabor de boca. Ahora, quiero resaltar lo de "a mí" porque he visto gente en Instagram que no piensa lo mismo que yo y que acabaron enfadados por el enfoque que se da al tema. A mí me ha gustado, pero lo comento por si acaso. La prota aparece en un lugar entre la vida y la muerte que no es otro que una biblioteca. Desde allí podrá "vivir" vidas en universos paralelos donde podrá descubrir cómo habría vivido si hubiera tomado otras decisiones. 

Para terminar, este mes no visto demasiado la tele, así que no traigo ninguna serie nueva. Para el que viene creo que tendré más de una... Ya veremos.