Érase una vez... enero

A la gente el mes de enero se le hace eterno, pero yo creo que dura lo que tiene que durar. Ni más ni menos. Eso sí, febrero me parece que vuela siempre. 

El mes de enero lo cogí con fuerza y empecé muy motivada con la lectura, pero me he tropezado con una novela que me está costando un poco y he terminado atascada. ¿Debería haberla dejado para más adelante? Puede. Tal vez no era el momento, pero todo el tiempo tenía la sensación de que estaba a punto de arrancar... En fin, no la he terminado, así que la dejo para el resumen de febrero. 

El café más caro de Navidad de Laura Tárraga. Es un relato romántico que cuenta la historia de una chica que se enamora de una chica de la que nunca pensó que se pudiera enamorar. No tienen nada en común a simple vista, pero ya sabéis que no hay que juzgar nunca por las apariencias. Me gustó. Era lo primero que leía de la autora y no será lo último. Como curiosidad diré que ya no está disponible. Es una "edición limitada" si queremos decirlo así, ya que la autora se ha propuesto escribir romántica porque es lo que le resulta más complicado, así que va a escribir (y regalar durante tiempo limitado) los cuentos que vaya escribiendo. El siguiente será en San Valentín. Podéis informaros en su perfil de Instagram.

Circe de Madeline Miller. Me duró muy pocos días esta novela entre las manos. Si conoces la mitología griega, entonces sabrás cómo acaba; en mi caso no lo sabía, o no lo recordaba, y me gustó mucho el final. Cuenta la historia de Circe, una hechicera muy poderosa a la que el mismo Zeus tenía miedo, así que decidió desterrarla a una isla desierta. Hacen repaso de varios mitos a lo largo de los siglos mientras cuentan las aventuras y desventuras de Circe en la isla, por lo que vemos a Odiseo, al Minotauro, a Dédalo, a Hermes... Me gustó mucho. 

Orange de Ichigo Takano. Es el primero de siete tomos. La historia pinta muy bien por ahora y sentí no tener el segundo tomo a mano para saber cómo sigue. Una adolescente recibe una carta de su yo del futuro De primeras no se cree que sea verdad, pero poco a poco ve que es real. La intención de las cartas es conseguir salvar la vida de un chico. ¿Lo conseguirá? 

En enero publiqué solo una reseña, la de Cuentos de amor victorianos. Os la dejo por aquí. 

En cuanto a las series os dejo dos: 

Romance is a bonus book. Está en Netflix y son dieciséis capítulos de una hora cada uno. Está en coreano. Solo coreano. La gente me mira raro cuando le digo que he visto algo en coreano, pero de verdad que la experiencia ha sido muy buena. Si pudiera verla en español, creo que volvería a verla en versión original. La historia es preciosa y tienen muy muy presente a los libros y a las editoriales. El personaje masculino principal está enamorado desde siempre de su mejor amiga, pero ella está recién divorciada y no sospecha nada. La relación que tienen entre ellos es muy bonita y tierna. Todos los personajes son geniales y, aunque algunos chocan entre ellos, todos coinciden en el amor que sienten por los libros. 

Mare of Easttown. Está en HBO y son siete capítulos de unos 55 minutos cada uno. Fue muy popular hace unos meses y, entre otras cosas, se conoció porque Kate Winslet, la prota, denunció que habían intentado corregir sus "imperfecciones" tipo, michelines o arrugas, con Photoshop. Mare es la detective de un pequeño pueblo americano. Hay un asesinato y ella tiene que investigarlo a la par que investiga también unas desapariciones y trata de dirigir un poco su vida. Me gustó mucho (me comí las uñas, literalmente, viendo la serie). La interpretación de Kate Winslet es muy buena.